domingo, 28 de enero de 2018

Capítulo VII: Lo inconfundible de las extraordinarias

Un hombre cualquiera tiene la innata capacidad de toparse con humanas extraordinarias y mujeres inconfundibles entre lo universitario de los campus y el vuelo del botafumeiro.

Las ciudades son escenarios que se añoran por las vidas que las ocuparon y no por las piedras que las construyen. De hecho, al revisitar los lugares en los que fuimos felices, rescatamos los recuerdos compartidos que, con el tiempo, aprendimos a degustar en lo inmortalizado de los viejos álbumes de fotos. Y, con ellos, la vida se construye por lo que hicimos, lo que reímos y lo que brindamos. Todo protagonizado por las personas que siguen estando a una llamada de teléfono, a una postal de correo, o a un viaje de distancia.

Y en ese álbum está inmortalizada la irónica politóloga, que fue capaz de imprimir su esencia entre los pupitres, como la luz lo hace sobre el celuloide. Pero ella no es un personaje, sino una protagonista. Y ha sido capaz de huir a la ciudad tras la 'Rebelión en la granja' lo que le aportó la libertad para volar. También, fundar una compañía solvente a lo 'Bonnie and Clyde' que le aseguró vivir sin miedo. Y, además, conseguir ser una 'Rebelde sin causa' que le definió como poseedora de la reconfortante felicidad.


Y así un hombre cualquiera espera seguir disfrutando de la esencia que caracteriza a a lo inconfundible de las extraordinarias.


¿Recuerda más extraordinarias inconfundibles?

miércoles, 17 de enero de 2018

Lo desafinado de la corrupción

Un hombre cualquiera teme que la mente se le corrompa perdiendo los recuerdos y la cordura por el silencio implacable del Alzheimer

Cuchara, Bicicleta, Manzana (2010). El President, Pasqual Maragall, protagonizó este documental sobre el tratamiento que comenzó, cuando en 2007, le diagnosticaron Alzheimer. Su figura pública ayudó para la visibilidad social de una enfermedad que afecta a millones de personas y, también, la creación de su fundación ha posibilitado fondos para el estudio de la prevención y análisis de la enfermedad. Indiscutiblemente, el carácter neurodegenerativo de la enfermedad hará que los recuerdos y conocimientos del alcalde de las Olimpiadas, del President del Estatut y del político socialista se vayan olvidando en su memoria. Pero, lo que quedará intacto serán la implementación de sus políticas, la tinta de los periódicos que contaron su vida y las palabras grabadas, como las que destaparon el caso de corrupción del 3% del puyolismo en el Palau de la Música.

El Príncipe (1513). Nicolás Maquiavelo escribió “Nunca intentes ganar por la fuerza lo que puede ser ganado por la mentira”. El estadista italiano fue mentor de líderes políticos para que no olvidaran buscar el propio interés para conseguir y mantener el gobierno. Incluso la corrupción podría ser facilitada con los maquiavélicos modos, consejos y estrategias que recoge en su obra. Sin embargo, aplicar estas prácticas tienen una cadencia desacompasada, como la desafinada música que rompió los cristales del palacio para propagar, por calles y plazas, el melodioso tintineo de las monedas robadas en los bolsillos ajenos. El director dejó caer la batuta y los violines comenzaron a desafinar, a medida que la brisa arrastraba por los suelos todas las partituras. Pero el espectáculo continuó y lo hizo con unos músicos que olvidaron las notas, mientras los pentagramas viraron en curvas sinuosas, que se acaban perdiendo entre los garabatos de la firma del juez.


Y así un hombre cualquiera tacha la notas discordantes del pentagrama para no corromper la armonía de cada recuerdo.