lunes, 31 de diciembre de 2018

Lo impulsado de los viajes

Un hombre cualquiera se prepara para el nuevo movimiento de traslación que está a punto de impulsarlo.

Durante el despegue le coge la mano a la soñadora en pijama para aplacar los nervios. Más por la lista de propósitos por completar, que por el viaje. Los preparativos esperan entre la maleta atiborrada de costuras y el cuaderno de bitácora hambriento de tinta. Y en la mochila con la vuelta al mundo en ochenta días de Julio Verne para inspirar los días y soñar la noches. También, hay un mapa plegado para encontrar los lugares donde aguardan nuestras futuras anécdotas y los paisajes que colorearán nuestras pétreas instantáneas. Y sin olvidar la aguja y la brújula que hilan los puntos cardinales sin sutura.

Y sin darse cuenta habrá que dejarse llevar por la velocidad de crucero para volar en vagones fletados por Hogwarts. Sumergirse por las corrientes de asfalto de la ruta 66. E, incluso, navegar sin preocuparse por el reloj al timón del Delorean. Sin duda, viajar es utilizar el tiempo para encontrar la felicidad.

Y así un hombre cualquiera espera templar los engranajes de rotación y traslación para moverse en un ¡Feliz 2019!

domingo, 23 de diciembre de 2018

Lo lírico de Nerón


Un hombre cualquiera imagina a Nerón, lira en mano, ensimismado ante las dentelladas de las llamas.

24 de diciembre de 1734, Alcázar de Madrid. Un incendio asola el palacio y reduce a cenizas la residencia real. En el fragor de las llamas algunas obras de arte son salvadas de la furia del dragón. Las 'Meninas' o el 'La lucha con los mamelucos' corren por los pasillos hasta alcanzar una ventana para huir del fuego. Otros muchos objetos artísticos, pasto de las llamas, se esfumaron para rellenar la pinacoteca privada del Infierno.

24 de diciembre de 2018, Museo del Prado. El tintineo de copas, las conversaciones familiares y los villancicos ensordecen la urgencia de las sirenas. El calor de las luces navideñas se hiela ante las llamaradas que claman por entradas y ventanas. Los tres pintores, acostados a las puertas, permanecen de espaldas con los ojos cerrados, empapados por las lágrimas e incapaces de ahogar la pesadilla. Tras Velázquez unos cristales rotos y una columna de humo acompañan a tres guardas de seguridad que abrazan a las Majas, el 'Jardín de las Delicias' y 'Duelo a garrotazos'. Vuelven a desaparecer hasta que las 'Meninas' casi sin respiración salen al exterior. Cuando llegan los bomberos una inmensa colección de cuadros decoran el paseo. Los exhaustos guardas de seguridad siguen sacando cuadros. Sin ayuda de renos, ni de elfos el paseo de ha llenado, por amor al arte, en un salón con regalos la madrugada del 25 de diciembre...

Y así un hombre cualquiera afina la lira que le han dejado bajo el árbol de Navidad. 

lunes, 17 de diciembre de 2018

Lo simbiótico de los extremos



Un hombre cualquiera rechaza la iniciativa de la presidencia del Congreso para borrar los insultos del diario de sesiones.

¡Golpista! ¡Fascista! ¡Españolazo! ¡Comunista! Los insultos a pie de calle se han colado entre los escaños del hemiciclo. Algún eco lejano se había dejado escuchar por los pasillos, pero, poco a poco, se han ido colando en el diario de sesiones. Las taquígrafas y taquígrafos han textualizado las palabras de Rufián, Iglesias, Rivera o Hernando, entre otros. Cómo portadores de la palabra de los ciudadanos llevan sus ideas al Congreso, pero como políticos deben fomentar la moderación y no la agresión constante. La dificultad de su cargo se encuentra en defender sus ideas a través de la argumentación. La amenaza, el insulto y la agresión deben quedarse fuera.

Sin embargo, la polarización es una estrategia política, que invisibiliza la escala de grises y retroalimenta a los enemigos. Estás prácticas ya fueron utilizadas antes; como heredero del terror de Robespierre, la actual estrategia del miedo contabiliza votos. Los beneficiados son los extremos como el Partido Popular con la izquierda abertzale o el Partido Popular con la izquierda bolivariana y viceversa. También se ha repetido entre el partido de Ciudadanos y los independentistas catalanes. O, como en las elecciones andaluzas, entre el PSOE y Vox. Los resultados son desiguales y las variables dependen de cada caso. Pero cada vez más se busca una polarización, que es incompatible con la base propia de la política.

Y así un hombre cualquiera piensa que borrar la realidad del diario de sesiones es construir un pasado imperfecto e incompleto.